11.3.12


Mientras el páramo de tu sonrisa suelte sus emociones justo aquí, en la comisura de mis labios… o en todo lo íntegro de ellos…
Mientras me eleves en tus besos alegres, mientras yo pueda comer de la felicidad que exhalas…
Mientras juguemos a sentirnos, a ser el uno en el otro… a disfrutarnos…
Mientras ello ocurra, mi vida tendrá la magia de la oportunidad, y la alquimia del deseo, que condensadas me evadiran del mundanal barullo de lo cotidiano, una, diez, cien y mil veces.
Mientras sea TU VIDA en mí… mientras existas para hacerme existir desde vos, mientras todo suceda en el plenilunio de tus atardeceres, seré la mujer más exquisitamente amada.
Porque nada hay mas sublime que el que me comas la boca desde tu alegría, mientras ríes… de esos besos, no todos saben dar.

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