30.10.11


Me llamas sin voces

brotas en mis pálpitos instintivamente

mientras percibo los tuyos en la infinita distancia

invitándome a probarte nuevamente.


Me convidas un poco de ti

antojándome tus besos y roces

recordándome que tu piel

es la única ambrosia que puede saciar mi apetito.


Me incitas, te deseo

quiero probarte

quiero sentirte en mi,

conmigo.


El calor de mi lengua recorriendo tus rincones

embravece tu sexo y me muestra la ansiedad

que va adueñándose de tu voluntad.

Saboreo sin prisa, disfruto cada gota, cada pliegue,

cada sensación, cada sentimiento.

Loco, deseoso por poseerme

besas y acaricias anárquicamente

sin rumbo, inconstante, caprichoso.

Contagiada de tu locura

nos transformamos en torbellino

vamos y venimos descontrolados

reconocemos antiguas rutas

reinventamos las mismas.


Advertimos el culmen

cruzando miradas un segundo

¡estallo! estrangulando tus palpitaciones

¡explotas! inundándome de ti.

No hay comentarios: